El reciente rechazo al trámite rápido del proyecto de jornadas laborales 4x3 en la Asamblea Legislativa ha generado controversia. La propuesta, que buscaba implementar jornadas de 12 horas durante cuatro días seguidos, seguidas de tres días de descanso, no alcanzó los 38 votos necesarios para su aprobación expedita, obteniendo solo 31 votos a favor y 19 en contra.
Entre los 19 diputados que se opusieron al trámite rápido se encuentran:
Nueve diputados del Partido Liberación Nacional (PLN): Dinorah Barquero, Óscar Izquierdo, Alejandra Larios, Luis Fernando Mendoza, Katherine Moreira, Rosaura Méndez, Francisco Nicolás, Pedro Rojas y Monserrat Ruiz.
Cinco diputados del Frente Amplio: Jonathan Acuña, Sofía Guillén, Antonio Ortega, Priscila Vindas y Rocío Alfaro.
Diputadas independientes: Gloria Navas, Kattia Cambronero, Cynthia Córdoba y Johana Obando.
Luz Mary Alpízar, presidenta del Partido Progreso Social Democrático.
A pesar de la división interna, siete diputados del PLN respaldaron la moción para el trámite rápido del proyecto.
La fracción del PLN se dividió en esta votación: mientras que nueve de sus diputados votaron en contra, siete, incluido Gilberth Jiménez, respaldaron la moción.
La posición de Jiménez refleja una postura favorable hacia la implementación de jornadas laborales de 12 horas durante cuatro días seguidos, seguidas de tres días de descanso, propuesta que busca adaptarse a nuevas modalidades laborales en el país.
Rodrigo Arias, presidente de la Asamblea Legislativa
Andrea Álvarez
Carolina Delgado
Paulina Ramírez
Albino Vargas, secretario general de la Asociación Nacional de Empleados Públicos y Privados (ANEP), ha sido un crítico constante del proyecto, calificándolo de "aberrante" y argumentando que atenta contra los derechos laborales y la salud de los trabajadores. El Frente Amplio también ha manifestado su oposición, considerando que la propuesta podría precarizar aún más el empleo en el país.
Con la negativa al trámite rápido, el proyecto enfrentará un proceso legislativo más prolongado, con la posibilidad de que se presenten numerosas mociones que podrían retrasar su discusión y eventual aprobación.
La situación plantea interrogantes sobre las verdaderas motivaciones detrás de la oposición al proyecto y cómo estas decisiones impactan en la generación de empleo y la adaptación a nuevas modalidades laborales en Costa Rica.
